LA CITOLOGÍA CERVICOVAGINAL, LO QUE DEBES SABER

La citología cervicovaginal, o citología como se conoce comúnmente (y como la llamaré en este texto), es un examen bastante frecuente en la vida de una mujer, sin embargo, en mi práctica como ginecólogo me he dado cuenta que muchas mujeres no conocen realmente en qué consiste ni cuál es su real importancia, lo cual lleva a que muchas no se lo realicen de forma consciente, o peor, que no se lo realicen. En el presente texto pretendo dar unos conceptos muy básicos para entender en qué consiste esta prueba y cuál es su real objetivo.  

¿Qué es una citología?

Es una prueba que permite estudiar las células del cuello uterino y de la vagina, con el fin de determinar si estas tienen cambios asociados al cáncer de cérvix. En esto es importante aclarar que la citología no se usa para estudiar infecciones vaginales, en caso de tener sospecha de una infección vaginal, se debe realizar un frotis de flujo vaginal. 

¿Por qué se debe hacer una citología?

El porqué de la citología tiene mucho que ver con dos conceptos del cáncer de cérvix que debes conocer: la primera es que este tipo de cáncer es una de las principales causas de muerte en mujeres colombianas (junto con el cáncer de mama) y la segunda es que en el desarrollo de este tipo de cáncer hay varias etapas tempranas (comúnmente llamadas precáncer) en las que se puede hacer tratamiento para evitar que se progrese al cáncer. Esas etapas tempranas pueden ser detectadas en una citología. 

¿Cuáles son los requisitos para la toma de citología?

Para una adecuada toma de la citología idealmente no debe haber obstáculos para la visualización del cuello uterino, en general las recomendaciones son: no haberse aplicado óvulos o cremas vaginales en los últimos tres días, no haber tenido relaciones sexuales los últimos tres días y que la menstruación haya terminado por lo menos hace 4 días. Si se tienen infecciones vaginales o flujo vaginal sí se puede tomar una citología. 

¿Cómo se hace?

La citología se realiza por medio de un examen ginecológico donde se introduce un aparato llamado espéculo en la vagina con el fin de visualizar el cuello uterino, normalmente se toman dos muestras una en la parte externa y otra en la parte interna del mismo. Estas muestras se esparcen en una placa de vidrio y se envían a un laboratorio con el fin de que sean evaluadas por un experto en el tema (estas personas son los citólogos). El tiempo desde la realización del examen hasta la entrega del resultado es usualmente de 4 días. Por tratarse de un examen ginecológico siempre tiende a generar un poco de incomodidad, pero en general no debe doler, por otro lado, después de la toma se suele quedar con un pequeño sangrado vaginal. Es muy importante que la citología sea tomada en un lugar certificado, por una persona debidamente entrenada con el fin de que el resultado sea lo más confiable posible. 

¿Cuándo se debe hacer una citología?

Existe controversia sobre la regularidad con la que se debe hacer la citología, de acuerdo a la guía de práctica clínica del ministerio de salud de Colombia se debe hacer desde los 25 años cada 3 años hasta los 65 años, aunque hay profesionales que siguen recomendando la citología anual. En mujeres embarazadas también es posible hacer este examen, normalmente en estos casos se espera el segundo trimestre de la gestación para la toma de las muestras.